a)
Habia una vez en un pequeño bosque, vivían felizmente muchos
animalitos. En una villa vecina, habitaba una bruja muy malvada, que
siempre intentaba capturar algún animal para poder poblar ella sola
ese lindo bosque. Un día, harta de que sus planes acabasen fallidos,
decidió hacer una poción que acabara con todos los animales que
poblaban el bosque. Salió un líquido verde, que le salían
burbujas, con un olor repugnante, que con solo tocarlo, ya se te
fundía la piel. Creada ya la poción, solo quedaba pensar como hacer
que los animales se la bebiera, y llegó a la conclusión de que los
animales solo beben agua del lago, entonces, coloco unos 10 frascos
de veneno verde en el lago, dejándolo absolutamente verde. Pasadas
dos semanas, conejos, ciervos, pájaros, insectos, vacas perros, todo
tipo de animal que se acercaba a beber, muerto quedaba. Y así fue
como el bosque quedó sin población, triste y terrorífico.
b)
Habia una vez un bosque solitario, con mal aspecto, al que nadie
deseaba cruzar, ni si quiera acercarse. Una bella mozuela que vivía
muy lejos de ese lugar, haciendo una excursión, dio con el triste
lugar, y fué la única en mucho tiempo que decidió adentrarse. Esa
chiquilla no tenia ningun temor, ya que no se escuchaba ningun
sonido. Pasados unos 15 minutos, llegó a un lago, un lago sucio y
con muchas ramas. Un olor espantoso. Al salir del bosque no podia
dejar de pensar en el aspecto de ese pobre bosque, y decidió poner
remedio. Consiguió unos cuantos hombres, habló con el zoo para que
dejaran en libertad a algunos animales, y se puso manos a la obra.
Limpió el lago, podaron árboles y matas, y dejaron a los animales
corretear felizmente.
·Las
circunstancias del viaje: con quién ibas, cúanto tiempo duró...
·¿Que
lugares conociste? Descríbelos.
·Incorpora
algunos sucesos o anécdoctas.
Mi
último viaje fue a Menorca, en verano de vacaciones. Fuimos la
familia de Sergi, la de Sergio y la mía. Nos alojamos en una casa
que nos dejaban unos amigos que tenían algún familiar por Mallorca.
Conocimos muchísimas playas, de un color azul cristalino, muy
bonito, y allí, me quité el miedo de tirarme de un sitio alto,
hacia el agua, y ese recuerdo permanecerá siempre en mi corazón.
Fueron una vacaciones inolvidables, las repetiría cada año, sin
duda, con la misma gente. Estuvimos una semana, menos mal que la
disfrutamos al máximo. Siempre me acordaré de las noches con Sergi
y Sergio, contando echos graciosos, inventando palabras con un toque
de gracia, y esas insuperables risas que despertaban a toda la casa,
son unos amigos que jamás cambiaría por nada.